Como no sólo de chancletazos vive
el Grillo, este Domingo 10 no había mejor excusa que ponerse las zapatillas de
deporte, calcetines de los domingos, cámara en ristre y acercarme al Parque
Lineal del Manzanares a retratar a todo corredor en el TROFEO PÁRIS que se pusiera en mi camino. Una carrera popular de
Madrid, en su pasada por agua 17ª edición y que tuve la suerte de probar en mis
carnes el pasado año.
Es alentador ver tantas miradas
conocidas, motivante poder inmortalizar esas inagotables caras de esfuerzo y
por supuesto disfrutar, desde el otro lado, con los chancletazos de los demás… que
con el objetivo de ser capturados terminan en interiorizarse como propios. ¡Enhorabuena!